El inicio de la etapa escolar es duro, sobre todo para los niños pequeños, y los que se enfrentan a las aulas por primera vez. Así, es muy habitual que, en las escuelas infantiles y los primeros cursos del colegio, las mañanas de septiembre empiecen con llantos inconsolables y niños que se agarran con fuerza a las piernas de sus padres, que les contemplan con impotencia sabiendo que tienen que dejarles allí y volver a sus obligaciones laborales.

Lo normal es que este llanto al entrar en el colegio dure unos días, pero si esto no ocurre, en lugar de dejar llorar al niño sin más, pensando que ya se le pasará, hay que indagar en los motivos, como nos contó Pilu Hernández, maestra, formadora de formadores y CEO de El Pupitre de Pilu.

Que un niño llore los primeros días de colegio es normal, y se debe, principalmente al miedo, pues les dejamos en un sitio nuevo con gente que no conoce, “lo más normal es que lloren y que tengan miedo, pues les estamos dejando con una persona extraña y en un sitio desconocido. Lo raro sería que no lo tuvieran y que se fueran tranquilamente con alguien que no conocen de nada”, nos dice Pilu.

Este proceso no es igual en todos los niños,

 » Leer más