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Una matanza clandestina ha provocado el mayor brote de triquinosis en España de los últimos siete años. Un total de 17 personas han sido dadas de alta en varios centros hospitalarios de Madrid y Ciudad Real tras contraer esta enfermedad parasitaria después de ingerir carne de una matanza no declarada que tuvo lugar el pasado 8 enero en la localidad ciudadrealeña de Retuerta del Bullaque.
El director general de Salud Pública de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, Manuel Tordera, ha pedido a la población que esté tranquila porque si se cumple con la normativa —pedir permiso al Ayuntamiento de la localidad donde se realiza la matanza y este habilita un veterinario para llevar a cabo el pertinente control sanitario— no hay «ningún problema de contagio» y ha pedido a quienes hagan una matanza que sigan la normativa vigente y confíen en los servicios sanitarios.
Según explica Mayo Clinic en su web, la traquinosis «es un tipo de infección provocada por ascáride. Los parásitos ascáride usan un cuerpo huésped para vivir y reproducirse. La infección ocurre principalmente entre animales que comen carne (carnívoros), como osos y zorros, o animales que comen plantas y carne (omnívoros), como cerdos domésticos y jabalíes. La infección se adquiere al comer larvas de ascáride en carne cruda o poco cocida».
En el caso de que un humano coma carne poco cocinada con larvas de triquinas, estas maduran dentro de los instentinos y en cuestión de semanas se convierten en gusanos adultos.
Síntomas
Los síntomas pueden aparecer entre dos y ocho semanas después de ingerir la carne infectada. En un caso leve (si se ha tomado poca cantidad), los signos de padecer triquinosis pueden incluso no manifestarse.
Si la cantidad de carne infectada ingerida es abundante, los síntomas aparecen cuando las larvas se trasladan dentro del cuerpo, por donde viajan a través de los distintos tejidos, incluidos los músculos. «Tú tragas larvas de triquina cubiertas por un quiste. Los jugos digestivos disuelven el quiste, y el parásito se libera dentro del cuerpo. Las larvas luego penetran la pared del intestino delgado, donde maduran, se convierten en lombrices adultas y se aparean», explican las mismas fuentes.