Es una enfermedad rara que se debe a un trastorno genético muy poco frecuente – según la fuente que se consulte afecta a una persona de entre 15.000 y 25.000- sin embargo, el síndrome de Prader-Willi produce innumerables problemas físicos, mentales y conductuales. Uno de los más importantes es la sensación constante de hambre que suele comenzar cuando los pacientes son todavía unos niños, alrededor de los tres años de edad.

Las personas con este síndrome necesitan comer de manera constante, nunca se sienten satisfechas (lo que se conoce por hiperfagia) y suelen tener muchos problemas para controlar el peso, algo que a su vez les provoca otras complicaciones asociadas a la obesidad: diabetes, presión arterial y colesterol altos, enfermedades cardíacas…

Conocido desde la década de los 50 gracias a las investigaciones de los doctores suizos Andrea Prader y Heinrich Willi, en la actualidad las pruebas genéticas pueden diagnosticar con éxito al 99% de los bebés con PWS (sus siglas en inglés). No existe cura para este síndrome, pero las personas que sufren este trastorno sí pueden beneficiarse de tratamientos para mejorar sus síntomas, que dependiendo de las necesidades individuales, suelen incluir una supervisión estricta de la dieta, fisioterapia, terapia conductual y tratamiento con hormona del crecimiento.

¿Cuál es su origen?

Según describen prestigiosas instituciones como la Clínica Mayo y el Instituto Nacional de Salud estadounidense el síndrome de Prader-Willi es un trastorno genético provocado por uno o más genes.

 » Leer más