Bajo el suelo del oriente africano habita un extraño animal, único en el mundo. Es un mamífero, concretamente un roedor, pero su comportamiento social se asemeja más al de un insecto. Es excepcionalmente longevo y, ahora, los científicos creen que podría ofrecernos información muy valiosa sobre el cáncer y sobre cómo tratarlo.

Los roedores más longevos

Hace tiempo que se sabe que las ratas topo desnudas llegan a vivir en torno a 30 años, una cifra muy superior a la del resto de los roedores. También se sabe que son fértiles durante toda esa larga vida, además de otras particularidades como que aparentemente no sufren dolor y que prácticamente no sufren cáncer.

Estas peculiares características han atraído la atención de científicos de todo el mundo, incluyendo equipos de la Universidad de Cambridge. Precisamente, Ewan St John Smith, neurólogo de esta institución, explicaba recientemente en el medio británico BBC que en estos animales «los signos estándar de envejecimiento que esperarías ver en la mayoría de los mamíferos en realidad no parecen ocurrir. No hay cambios significativos en la función cardíaca, la composición corporal, la calidad ósea o el metabolismo».

«He tenido mis animales en Cambridge durante 10 años y nunca he visto uno que simplemente muera por causas naturales«, añade. Y, mientras que «uno de cada dos humanos tiene probabilidades de enfermarse de cáncer […] y las ratas y los ratones tienen una probabilidad similar,

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