El deterioro de la situación en Bolivia tras la salida del país de Evo Morales alcanza ya a La Habana. La detención de cuatro colaboradores de la salud cubanos en la ciudad de El Alto, vecina a La Paz, el pasado jueves, provocó este viernes la decisión de Cuba de retirar a todos los médicos y cooperantes que trabajan en el país sudamericano, alrededor de 725 personas. Mientras, el presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, denunciaba en su cuenta de Twitter el inadmisible “acoso y maltrato» sufrido por los colaboradores y alentado, dijo, por “irresponsables expresiones anticubanas y de odio, la mentira, las difamaciones e instigaciones a la violencia”.
Las nuevas autoridades bolivianas acusaron a los cuatro cooperantes de financiar y apoyar las protestas que tienen lugar en Bolivia, tras detenerlos con una fuerte suma de dinero. La Cancillería cubana asegura que todo es una campaña para incitar “a la violencia contra el personal de la salud” de la isla, y que no es casualidad que coincida con los argumentos expresados desde “cuentas de dudosa procedencia y perfiles falsos” en la redes sociales.
Cuba afirma que los cuatro colaboradores fueron detenidos por la policía “cuando se trasladaban hacia su local de residencia con el dinero extraído de un banco para pagar servicios básicos y alquileres de los 107 miembros de la Brigada Médica en esa región”. La Habana rechaza rotundamente que el dinero estuviera destinado a financiar ningún desorden, y asegura que la policía y las autoridades visitaron “las sedes de la Brigada Médica en El Alto y La Paz y corroboraron, a partir de documentos, nóminas y datos bancarios, que la cifra de dinero coincidía con la cantidad extraída regularmente todos los meses”.
Para La Habana, todo es parte de un intento interesado de desacreditar a la misión médica cubana y generar un ambiente adverso entorno a los colaboradores, por lo que anunció la retirada inmediata de todos ellos para garantizar su seguridad. “Los millones de bolivianos que han recibido la altruista atención de los cientos de médicos cubanos conocen perfectamente que las mentiras no podrán ocultar la meritoria contribución y noble propósito de nuestros profesionales de la salud”,