El zumbido de decenas de miles de mosquitos Anopheles, transmisores de la malaria, puede sentirse en los arrozales de Cheju, área rural a las afueras de la capital de Zanzíbar y escenario de un novedoso proyecto piloto contra la enfermedad: rociar estos campos utilizando drones para evitar que los millares de larvas se transformen en mosquitos.

Bajo la mirada curiosa de un puñado de agricultores locales, un dron gigante de la compañía china JDI sobrevuela los arrozales a modo de entrenamiento: primero tan solo fumigaba agua, pero desde el 2 de noviembre deja caer un líquido viscoso capaz de asfixiar a las minúsculas larvas. Así lo hará durante un mes entero. «Creemos firmemente que prevenir la malaria es más inteligente que curarla. Lo haremos matando al mosquito antes de que eche a volar», resume Guido Welter, la mente pensante detrás de este proyecto cuya puesta en práctica lleva esperando cinco años.

«Aquí, a Zanzíbar, llegan todos los días en el transbordador (desde la parte continental de Tanzania) personas con el parásito (Plasmodium), pero si el Anopheles no está, la enfermedad no se propaga», continúa quien se define a sí mismo como un idealista hoy más cerca de alcanzar su sueño: erradicar una enfermedad que sufren más de 219 millones de personas en el mundo.

Cheju, área rural a las afueras de la capital de Zanzíbar es escenario de un novedoso proyecto piloto contra la malaria con drones.Cheju, área rural a las afueras de la capital de Zanzíbar es escenario de un novedoso proyecto piloto contra la malaria con drones. Patricia Martínez EFE

La dificultad de conseguir los permisos necesarios en países vecinos como Ruanda o Kenia —del Ministerio de Defensa, de la Autoridad Civil de Aviación o del Ministerio de Agricultura— hizo de la mayor isla del archipiélago tanzano el emplazamiento idóneo para este microensayo; siendo bien acogido por el Programa de eliminación de la Malaria de Zanzíbar (Zamep), dependiente del Ministerio de Sanidad.

«Lo que estamos haciendo ahora es expandir nuestras alas en lo relativo al control de la natalidad del mosquito. Usar drones para tratar los cuerpos de agua donde se desarrollan estos insectos nos brinda una oportunidad hasta ahora inimaginable»,

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