Se trata de una afección originada por la inflamación de la vejiga que en la mayoría de casos se debe a una infección bacteriana, por lo que se denomina como una infección urinaria. Sin duda, es un problema molesto y doloroso que afecta a un gran porcentaje de la población a lo largo de su vida.
De hecho, según la Clínica Universidad de Navarra (CUN), la infección urinaria «es la enfermedad más frecuente del aparato urinario y de todo el organismo después de las respiratorias».
A nivel general, la cistitis es ocasionada por la presencia de bacterias en la orina, sobre todo por la Escherichia coli (E.coli), y de forma excepcional por hongos o virus. Sin embargo, aunque es menos frecuente, también puede aparecer «como una reacción a determinados medicamentos, a la radioterapia o a irritantes potenciales, al uso prolongado de un catéter o como una complicación de otra enfermedad», añaden desde Mayo Clinic.
Dolor o escozor al orinar, sensación constante de querer hacer pis (a menudo en pequeñas cantidades), molestias pélvicas o tener la orina turbia y de olor fuerte son algunos de los signos de alerta más comunes a la hora de identificar una posible cistitis.
El cuadro clínico cursa casi siempre sin fiebre,