La reforma sanitaria impulsada por Obama —conocida popularmente como Obamacare— en 2010 tiene, como todos los proyectos, luces y sombras. Ha servido para dar cobertura a unos 20 millones de ciudadanos que antes no tenían seguro de salud, también ha combatido algunos abusos de las aseguradoras por tener problemas de previos de salud o la negativa a atender a personas en dicha situación. Sin embargo, también ha mostrado muchas ineficiencias en los años que lleva en vigor, ha disparado el precio de los seguros privados y reducido ostensiblemente la oferta. Para los conservadores, además, supone un símbolo intervencionista de la anterior Administración demócrata. Pero el apoyo general entre la población se encuentra en el 48%, según un sondeo de Gallup de noviembre pasado. Aunque un estudio de la misma firma publicado este martes señalaba que los estadounidenses habían tenido que pedir prestados 88 millones de dólares (unos 76 millones de euros) para pagar por su salud.

Con este caldo de cultivo, Trump tomó el Obamacare como uno de sus caballos de batalla durante su campaña electoral, pero una vez en la Casa Blanca, poner de acuerdo a los legisladores de su propio partido en un modelo alternativo se ha constatado igualmente complicado. Ahora, ha dado a entender que deja el asunto para después de las próximas elecciones. “Todo el mundo está de acuerdo con que el Obamacare no funciona. Las primas [del seguro] y las deducciones son demasiado elevadas. ¡Un sistema muy malo! Incluso los demócratas quieren reemplazarlo, pero con un Medicare para todos, que llevaría a 180 millones de estadounidenses a perder su querido seguro médico privado”, escribió Trump el lunes por la noche.

Los republicanos, continuó “están desarrollando un plan de salud realmente bueno con costes y desgravaciones más bajos que los del Obamacare. En otras palabras: será, cree, menos caro y más útil. Lo votaremos justo después de las elecciones, cuando los republicanos mantengan el control del Senado y recuperen la Cámara de Representantes. Será un sistema verdaderamente bueno que funcionará para Estados Unidos”.

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