El Instituto de Salud Carlos III ha realizado el primer informe concreto sobre el impacto que la Covid-19 está teniendo entre los profesionales sanitarios que combaten la pandemia. El estudio ha analizado los 30.660 casos que fueron notificados a la Red Nacional de Vigilancia Epidemiológica (Renave) antes del mediodía del pasado lunes y establece que tres de cada cuatro contagios se ha producido entre mujeres: son 23.178 enfermas frente a los 7.482 infectados. La edad media de estos enfermos es de 46 años y es casi idéntica en los dos sexos (47 años los varones, 46 años las féminas).
Los síntomas más frecuentes que han desarrollado estos trabajadores contagiados son tos (72,6% de los casos), fiebre (66,1%), dolor de garganta (35,9%) y escalofríos (35,1%). Uno de las primeras alertas de la Covid-19, como era la disnea o dificultad para respirar, se queda en el quinto lugar de los síntomas más frecuentes (31,5%), lo que demuestra que cada vez se van conociendo más características de esta enfermedad de tan solo cinco meses de vida. Por ejemplo, una cuarta parte de los pacientes (27%) sufrieron diarrea, con más incidencia entre las profesionales sanitarias (28%) que entre los hombres.
En cuanto a las franjas de edad, el coronavirus SARS-CoV-2 afecta muy poco a los profesionales que no han llegado a la treintena (13% de los infectados) y roza el 30% en los médicos, enfermeros, auxiliares o celadores entre 50 y 59 años (8.648 personas contagiadas). También es la franja de edad que acumula más hospitalizaciones (1.154 casos), aunque es relevante que apenas uno de cada diez sanitarios enfermos requirieron ser ingresados para ser tratados. El informe destaca que es seis puntos superior el ingreso entre los varones que entre las mujeres).
Por otra parte, el Instituto de Salud Carlos III recalca que solo 249 pacientes tuvieron que ser ingresados en las unidades de cuidados intensivos.