MERCEDES BORJA

Sarampión

Desde el año 1981 la vacuna del sarampión está incluida en el calendario oficial a través de la vacuna triple vírica, que protege también contra la rubeola y las paperas. Se trata de una vacuna que se puede poner a partir del año de vida, y de la que se deben recibir dos dosis para que sea eficaz. En las últimas semanas hemos asistido a diversas informaciones que aconsejaban que todas las personas nacidas en España entre 1970 y 1980, lo que ha hecho saltar algunas alarmas. ¿Ha rebrotado el sarampión en España? ¿Están en peligro todas las personas que no están vacunadas? La respuesta a ambas preguntas es no, y lo explicamos a continuación.

La recomendación no es nueva

Desde 2016, según informa el Ministerio de Sanidad, la OMS considera que el sarampión en nuestro país está en ‘estado de eliminación’, un estado que además la sido confirmado recientemente, algo que no ha sucedido en otros países europeos, como Gran Bretaña, Grecia o la República Checa, donde ha vuelto a resurgir la enfermedad. Entonces, ¿por qué el Ministerio aconseja ahora que se vacunen todas las personas nacidas entre 1970 y 1980? La respuesta es que, en realidad es una estrategia que no cambiado, y que está vigente desde 2018, algo que aclaró el Ministerio el día 11 de septiembre a través de una nota informativa (Descarga la nota aquí).

¿Tiene que vacunarse todo el mundo?
La estrategia de España en torno al sarampión, que nada tienen que ver con una alerta sanitaria, va encaminada a conservar la situación epidemiológica del sarampión en España y que se cumpla el objetivo de la OMS de erradicar la enfermedad en la región europea para el año 2020. Para ello, es necesario que se alcance y se mantenga la cobertura de vacunación de la triple vírica en torno al 95%. Desde 2018, el ministerio recomienda:

  • Vacunar durante la infancia. Desde 1981 se recomienda la administración de dos dosis de vacuna triple vírica durante la infancia, que suelen ser a los 12 meses y los 3-4 años. Si después de esa edad no están vacunados, se recomienda hacerlo cuanto antes, poniendo las dos dosis con al menos cuatro semanas de intervalo entre una y otra.

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