El omeprazol es un aliado casi indispensable de aquellas personas que padecen problemas relacionados con el ácido gástrico, ya sean puntuales o crónicos. Sin embargo, y tal y como sucede con todos los medicamentos, no está exento de ciertos efectos adversos que podrían acentuarse con el consumo continuado.

Efectos recogidos en el prospecto

El omeprazol es lo que conocemos como un inhibidor de la bomba de protones, un grupo de medicamentos que bloquean la producción de ácido clorhídrico, con lo que es muy útil para tratar afecciones tales como las úlceras de estómago o de duodeno, el reflujo gastroesfofágico o la esofagitis entre otras muchas. En ocasiones, se emplea de manera crónica, por ejemplo como complemento a tratamientos que son irritantes para el estómago.

De manera puntual, se ha encontrado que el omeprazol resulta seguro, y los efectos secundarios son leves y poco frecuentes. No obstante, existen evidencias de que el consumo continuado durante largos periodos de tiempo puede tener una serie de consecuencias graves, tal y como recoge la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS). Algunas de ellas incluyen:

  • Aumento del PH gástrico, facilitando la colonización del tracto digestivo por patógenos como Salmonella, Campylobacter o Clostridium difficile.
  • Déficit en la absorción de vitamina B12.

 » Leer más