Cuando hace dos días las autoridades chinas informaron de que la misteriosa neumonía de la ciudad de Wuhan se debía a una nueva cepa de un coronavirus similar al que en 2002 provocó la epidemia de SARS (síndrome respiratorio agudo grave, por sus siglas en inglés), llamaron a la calma asegurando que hasta entonces todos los pacientes evolucionaban con normalidad. Apenas dos días después, el brote se ha cobrado su primera víctima mortal.
La Comisión Municipal de Sanidad de Wuhan, población situada en el centro del país y capital de la provincia de Hubei con 11 millones de habitantes, ha anunciado esta mañana que un hombre de 61 años ha fallecido a consecuencia de la afección. De las 41 personas diagnosticadas hasta la fecha, siete permanecen en estado grave, mientras que otras dos que ya no presentaban síntomas han sido dadas de altas.
Las autoridades, no obstante, han querido enviar un mensaje de tranquilidad, asegurando que no se han detectado nuevos casos desde el pasado 3 de enero y que ningún miembro del equipo médico se ha contagiado. “No hay evidencias de que se transmita entre humanos”, ha asegurado un portavoz del organismo. “La gente que ha estado en contacto directo con los enfermos, personal sanitario incluido, no se han infectado”.
Esta misteriosa dolencia surgió en Wuhan el pasado diciembre. La mayoría de los enfermos trabajaban en un mercado de pescados y mariscos en el que se comerciaba con animales vivos, donde se sospecha que puede localizarse el origen del patógeno. Desde entonces, la zona ha permanecido cerrada y en cuarentena.
Wang Guangfa, especialista en medicina respiratoria del Primer Hospital de la Universidad de Pekín y miembro del equipo investigador que la semana pasada logró aislar la secuencia genética del agente infeccioso, ha asegurado que la situación de los pacientes y las condiciones generales del brote están “bajo control” en una entrevista con la televisión pública nacional CCTV. Sin embargo, entre la población preocupa la proximidad del año nuevo chino, que tendrá lugar el próximo 25 de enero,