Un hospital de Reikiavik diagnosticó por error el pasado 8 de junio el chikungunya a tres turistas islandeses recién llegados de Alicante por «un fallo del laboratorio», según ha explicado por escrito a EL PAÍS el jefe de Epidemiología del Ministerio de Sanidad del país nórdico, Thorolfur Gudnason.

«El laboratorio nos ha explicado que ha encontrado la causa del error, que ya ha sido corregida. Hemos informado a todas las autoridades relevantes de este desafortunado incidente, incluyendo al Centro Europeo para la Prevención y Control de Enfermedades (ECDC), la OMS y el Ministerio de Sanidad español», ha añadido Gudnason.

Islandia activó la alerta europea el 12 de junio para informar a España y al ECDC de los tres diagnósticos, hechos a una mujer de 37 años, su hijo de cinco y una hermanada de la madre. Los tres habían pasado unos días de vacaciones entre el 17 y el 31 de mayo junto a otra hermana, que vive en Noruega. Al regresar a su país sufrieron fiebre, erupción cutánea y dolores en las articulaciones, síntomas compatibles con el chikungunya.

El hospital al que acudieron los tres turistas utilizó la llamada prueba PCR —por las siglas en inglés de la expresión «reacción en cadena de la polimerasa»—, capaz de detectar minúsculos trozos del ADN de los patógenos y que se ha consolidado en los últimos años como el sistema de diagnóstico rápido más utilizado en todo el mundo. Los análisis, sin embargo, «dieron un falso positivo en los tres casos», admite Gudnason.

La alerta, hecha pública por la Generalitat Valenciana el 14 de junio, tomó gran relevancia ya que hubieran sido los primeros casos de transmisión local en España de esta enfermedad, endémica de zonas tropicales pero que en los últimos años ha provocado varios brotes en Italia y Francia. El vector que ha hecho posible estos brotes el Aedes albopictus, más conocido como mosquito tigre, de origen asiático pero que en los últimos años ha vivido una notable expansión por todo el sur de Europa.

 » Más información en elpais.es