Distintos expertos e investigadores británicos en neumología y los efectos del tabaco en la salud aseguran que vapear es menos dañino que fumar y un método eficaz para dejar ese hábito y se han mostrado críticos con algunas de las informaciones difundidas por la Organización Mundial de la Salud (OMS), por considerar que han generado «desinformación» entre la población.

El doctor Nick Hopkinson, especialista de en medicina respitaroria del Instituto Nacional de Corazón y Pulmón del Imperial College de Londres, ha afirmado que “sabemos que los cigarrillos electrónicos son sustancialmente más seguros que fumar, debido a que las sustancias tóxicas presentes en el vapor son un 95% menos dañinas y los niveles de toxicidad son muchísimo más bajos”.

“La evidencia de los ensayos controlados aleatorios indican claramente que los cigarrillos electrónicos pueden ayudar dejar de fumar», indicó

Por su parte, el profesor Peter Hajek, director de la Dependencia del Tabaco en la Unidad de Investigación de la Universidad Queen Mary de Londres, ha señalado que “la OMS tiene una historia de activismo antivapeo que está dañando su reputación. Prácticamente todas las respuestas que se incluyen en el citado documento son erróneas”, afirma en relación a apreciaciones de la OMS.

El profesor Hajek incluso considera que los autores del documento de la OMS sobre este asunto “deberían asumir su responsabilidad por el uso de información errónea flagrante que puede evitar que haya fumadores que cambien a una alternativa mucho menos dañina que el tabaco”.

El profesor John Britton, director del Centro de Estudios de Reino Unido sobre Tabaco y Alcohol y consultor en medicina respiratoria de la Universidad de Nottingham, critica que la OMS “tergiverse la evidencia científica disponible acerca de los dispositivos de vapeo”.

Britton defiende que las enfermedades pulmonares en Estados Unidos atribuidas al vapeo han estado provocados por usar productos del cannabis y que el cigarillo electrónico se ha demostrado que es más efectivo para dejar el tabaco que otras terapias de reemplazo de nicotina que respalda la agencia de la ONU.

Las críticas se producen después de que las autoridades sanitarias estadounidenses señalaran que los estudios y datos clínicos acometidos tras los problemas pulmonares que han sufrido usuarios de vapeadores concluyeran que detrás de los mismos están productos y dispositivos no autorizados adquiridos fuera de los circuitos comerciales autorizados.

 » Más información en 20minutos.es