Reconstrucción de una familia neandertal en la cueva de Krapina, en Croacia. Nikola Solic REUTERS | Audio: Onda Cero

Desde que se descubrieron sus primeros restos óseos, en el siglo XIX, los neandertales siempre han resultado una presencia incómoda. La idea de que existieron otros humanos, miembros de la misma especie, pero claramente diferentes, era difícil de asimilar por lo que resultó mucho más fácil describirles como brutos y salvajes frente a los civilizados Homo sapiens, nuestra especie. Sin embargo, en las últimas décadas, esa imagen ha cambiado totalmente y se les considera tan avanzados, intelectual y tecnológicamente, como nosotros.

Ese cambio de percepción, basado en un aluvión de evidencias científicas, todavía no ha calado totalmente como queda claro después de las insultantes —contra las mujeres y contra los neandertales— declaraciones de Adolfo Suárez Illana, número dos de la lista del PP por Madrid. “Los neandertales también lo usaban [en referencia al aborto], pero esperaban a que naciera y le cortaban la cabeza”, ha declarado en una entrevista con Carlos Alsina en el programa Más de Uno, en Onda Cero. La imagen de esos otros humanos como asesinos despiadados, que se comportaban como animales —el infanticidio es habitual en bastantes especies, donde las madres tienen que proteger a los cachorros de los machos—, es muy difícil de arrancar del imaginario colectivo al igual que siempre es complicado derrotar la ignorancia. Porque la ciencia dice algo totalmente diferente.

El antropólogo del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), Antonio Rosas, uno de los mayores expertos mundiales en neandertales, no tiene ni idea de dónde ha sacado el político conservador esa peregrina idea porque sus afirmaciones no tienen ninguna base en el registro arqueológico. “No hay ninguna evidencia de infanticidio. Ninguna. Lo que sabemos es más bien todo lo contrario, porque sí que hay evidencias de que los niños recibían un tratamiento mortuorio especial”, explica Rosas, autor de libros como Los fósiles de nuestra evolución (Ariel) y Los neandertales (Catarata / CSIC) y que excavó en la cueva asturiana de El Sidrón,

 » Más información en elpais.es