El Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 1 de Toledo ha condenado al Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (SESCAM) a indemnizar a una mujer y a sus hijos con 73.814 euros por la muerte del padre de familia como consecuencia del retraso en el diagnóstico y tratamiento del cáncer de vejiga que padecía.
El paciente, de 63 años, se sometió en marzo de 2013 a una citología de orina y a una ecografía urológica en el hospital «Nuestra Señora del Prado» de Talavera de la Reina (Toledo) en la que se apreció «una imagen nodular que podría corresponder a una patología neoformativa». A pesar de que contaba con antecedentes oncológicos no se le realizó un diagnóstico definitivo hasta enero de 2014, fecha en la que ingresó en el hospital por otra patología: una trombosis venosa profunda.
Sin embargo, el tumor agresivo musculoinfiltrante que padecía lo tenía muy extendido y el paciente ya no tenía expectativa de curación. Tras su fallecimiento, sus familiares decidieron denunciar el asunto ante la Justicia a través de la asociación «El defensor del paciente», que ahora les ha dado la razón.
La sentencia obliga ahora al SESCAM a indemnizar a la viuda y dos hijos del paciente con 73.814,25 euros en proporción de un 70% para la mujer y de un 15% para cada uno de sus hijos.