La cinta de correr es una de las máquinas por excelencia en todos los gimnasios, una de las más utilizadas por aquellos adictos al cardio o que su mayor objetivo a la hora de hacer deporte es perder peso y adelgazar.
Efectivamente, esta máquina permite andar y correr variando la rapidez o la intensidad, sin salir a la calle ni desplazarse, y alternando también la pendiente de trabajo. Además, es un buen método para aprender o practicar la técnica de carrera, la postura y medirse tiempos propios.
Sin embargo, como todas las máquinas y ejercicios, la cinta de correr requiere una técnica, una buena posición y, también, unas recomendaciones que permitan sacarle el máximo partido y conseguir ponerse en forma de manera eficaz.
Tanto para aquellos que empiezan de cero en la cinta de correr o que ya llevan tiempo practicando deporte en ella, es fundamental tener en cuenta la postura y la técnica. Habrá que colocarse en la zona final de las barras laterales, de modo que el cuerpo no quede muy pegado a la parte delantera de la máquina.
Además, la postura es importante a la hora de correr. Habrá que estar relajado, pero con los hombros y la cabeza estirados, sin inclinarse hacia delante, con los codos doblados y las manos relajadas.