La mayoría de las personas que hacen dieta, vuelven a recuperar parte, o todo lo que han perdido. La ciencia tiene una explicación de por qué ocurre esto, y tiene que ver con el metabolismo.
Tal y como recoge Science Alert, algunos estudios apuntan a que esta recuperación se debe a que la dieta arruina permanentemente el metabolismo. Pero si bien es cierto que hacer dieta ralentiza el metabolismo, también mejora el metabolismo de muchas maneras positivas.
Cuando se habla de metabolismo, normalmente se hace referencia a la tasa metabólica. Esta es la cantidad de calorías que el cuerpo quema en reposo. Por supuesto, cuanta más actividad hacemos, más calorías quemamos.
Para perder peso haciendo dieta, se necesita consumir menos calorías de las que se consumen. Esto obliga al cuerpo a utilizar sus reservas de energía, como la grasa, para cubrir el déficit. La tasa metabólica también cambiará como resultado.
La pérdida de tejido magro (músculo) cuando se hace dieta, que quema alrededor de 15-25 calorías por kilogramo cada día, reduce la tasa metabólica en reposo, lo que significa que se necesitan menos calorías que antes. Pero el cuerpo también ralentiza deliberadamente el metabolismo para preservar las reservas de energía y minimizar la pérdida de peso.