La automedicación con analgésicos suele ser un remedio socorrido para tratar un dolor leve. Son de fácil acceso, se suelen tener por casa, asequibles de precio, no requieren prescripción médica… pero, ¿conocemos realmente sus características básicas, sus usos apropiados o sus efectos secundarios?
Un reciente estudio realizado por la farmacéutica Stada – en el que han participado 32.000 personas de 16 países europeos-, refleja que casi la mitad de los europeos desconocen las características fundamentales del ácido acetilsalicílico (47%) o del paracetamol (42%). “Aunque los analgésicos no deben tomarse a la ligera, los europeos muestran una falta de conocimiento”, añaden.
El llamado Stada Healt Report asegura también que la mayoría de los europeos se automedican de forma regular: la mitad de los europeos (53%) y de los españoles (51%) recurre a los analgésicos al menos una vez al mes; el 18% lo hace una vez a la semana, y el 7% incluso a diario.
En España, es superior el número de mujeres que recurren a los analgésicos en comparación con los hombres: un 55% en el caso de ellas frente al 47% de ellos. La edad es otro factor significativo: cuanto mayores son los españoles, menos recurren a este tipo de medicamentos: el 53% de los mayores de 55 años se automedica con menos frecuencia que una vez al mes,