El combate prosiguió hasta el final, pero cuando su rival, el luchador Juventud Guerrera, le propinó una última patada en el costado, el actor y profesional mexicano de lucha libre Cesar Barrón, de 51 años, conocido como Silver King, yacía ya muerto en la lona. Había sufrido un ataque al corazón cuando participaba en un combate de lucha libre celebrado en la noche de este sábado en el Roundhouse del barrio londinense de Camden, un antiguo depósito de motores ferroviarios reconvertido en sala de conciertos y espectáculos.

Silver King era muy conocido en el mundo de la lucha libre, que en México congrega a multitudes de aficionados. Sus estrellas visten capas vistosas y máscaras coloridas que deben quitarse para mostrar su verdadero rostro en el caso de ser derrotados. Barrón, hijo de una familia de luchadores —su padre era conocido en el cuadrilátero como Doctor Wagner y su hermano como Doctor Wagner Junior— adquirió fama más allá del circuito de este espectáculo al participar, en el papel de Ramsés, junto al actor Jack Black en la película cómica Nacho Libre, en 2005.

En las imágenes del combate, que ya han circulado por las redes sociales, tanto su rival como el árbitro aparecen confundidos ante el repentino desfallecimiento de Silver King. Al no levantarse de la lona, Juventud Guerrera mira a uno y otro lado en un aparente intento de buscar explicación al comportamiento de su contrincante mientras dan inicio al conteo de la derrota.

Los organizadores del evento pidieron al público que abandonara el recinto mientras un equipo médico intentaba, sin éxito, reanimar a Barrón. En torno a las 11:20 de la noche (hora peninsular española), se llamó al servicio londinense de ambulancias. Poco después, el luchador fue declarado muerto en el mismo lugar del combate.

«Nuestro pensamiento y nuestro pésame están con la familia, los amigos y todo el mundo de la lucha libre», dijeron los organizadores del evento en un comunicado escrito. La Policía Metropolitana de Londres abrió una investigación preliminar pero declaró de inmediato la muerte de Silver King como «no sospechosa».

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