Dos trabajadores de Carnes Sierra Madrid, SA, en unas imágenes grabadas por una persona infiltrada el pasado verano. EQUALIA

De nuevo las imágenes dentro de un matadero hablan por sí solas. Se trata ahora de Carnes Sierra Madrid, SA, en Collado Villalba, y lo que se ve dentro de sus paredes tiene un valor añadido: el vídeo que lanza la asociación Equalia lo ha grabado la primera persona infiltrada en un desolladero. El sufrimiento de las vacas antes de morir es incuestionable: reciben estimulación eléctrica sin ser aturdidas, cuando la legislación obliga a que el animal ya esté muerto. El matadero no ha respondido a las preguntas de este periódico.

Ya pasó en septiembre pasado con otro matadero de la Comunidad de Madrid, el de Cárnicas Salvanés, SL, en Villarejo de Salvanés. Las imágenes de corderos pateados, sin crotal y con condiciones higiénicas cuestionables dieron la vuelta al mundo. Ahora le toca a otro desolladero de la región, en este caso en Collado Villalba. En este caso se trata de ganado vacuno y tiene una peculiaridad importante: las imágenes no se han conseguido gracias a cámaras ocultas, sino que las ha filtrado un trabajador que, al ver una sucesión de irregularidades, decidió ponerse una pequeña cámara en la solapa de su bata el verano pasado. El resultado del vídeo que lanza hoy la asociación pone los pelos de punta.

Una vaca, boca abajo, lleva unas pinzas de electrodos en el morro y patalea cuando le dan una descarga. Esta práctica, cada vez más rara en los mataderos españoles, se realiza para mejorar la calidad de la carne. La corriente hace que los músculos se contraigan y cuando entran en rigor mortis previene el acortamiento excesivo de las fibras musculares. Esto posibilita la blandura o terneza de la carne, una de las cualidades organolépticas junto al color, olor y sabor.

Según la normativa de control de bienestar animal, “la estimulación eléctrica solo se efectuará cuando se haya comprobado la pérdida de consciencia por parte del animal”. El matadero de Collado Villalba está asociado a la indicación geográfica protegida Carne de la Sierra de Guadarrama,

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