Los efectos de la pandemia en la vida de las próximas generaciones son inmensurables: tendrán que vivir con sus consecuencias a nivel de política sanitaria, económicas y culturales, aún difícilmente previsibles. No obstante, eso no es todo: parece ser que la pandemia podría estar teniendo algún efecto sobre el mismo desarrollo de sus cerebros.
Esto es lo que se pregunta un grupo de científicos, cuyas dudas plasma un artículo publicado en el medio especializado Nature. La idea de que un fenómeno así puede estar sucediendo, explica el texto, parte de la preocupación inicial por los efectos que podía tener la propia infección sobre los niños recién nacidos y en el vientre materno.
Diferencias en habilidades motrices y comunicativas
A medida que algunos pediatras, como Dani Dimitriu del New-York-Presbyterian Morgan Stanley Children’s Hospital comenzaron a ver que, en principio, la enfermedad en sí no parece tener efectos especialmente graves en los niños, se sintieron aliviados. Sin embargo, al analizar las habilidades motoras y de comunicación de los nacidos durante la pandemia (al margen de que hayan pasado por la enfermedad) con los nacidos previamente encontraron algo inquietante.
En colaboración con Morgan Firestein, investigador de la Universidad de Columbia, Dimitriu llevo a cabo un estudio sobre estos parámetros y encontró que los nacidos durante la pandemia parecían obtener,