Las enfermedades cardiovasculares son actualmente la principal causa de muerte en el mundo. Entre ellas, una de las más letales e incapacitantes es el accidente cerebrovascular, lo que popularmente conocemos como ictus.

En esencia, un ictus consiste en un cese del riego sanguíneo en una parte del cerebro, ya sea por el bloqueo de un vaso (ictus isquémico) o por un derrame sanguíneo (ictus hemorrágico). Sea como sea, lo que está claro es que puede causar graves daños en el cerebro, y que como es lógico la mayoría de sus síntomas son de naturaleza neurológica.

Riesgo ligeramente inferior en hombres

Siempre se incide en la importancia de detectar los síntomas del ictus de manera temprana para mejorar el pronóstico del paciente, ya que una vez que el evento se ha iniciado cada segundo que pasa se incrementa el riesgo de que se produzcan daños permanentes. No obstante, un aspecto que a menudo se ignora es que pueden existir algunas diferencias significativas en cómo se presenta este incidente en función del género de quien lo sufra. En este caso, vamos a centrarnos específicamente en sus manifestaciones más característicamente masculinas.

No se trata de un síntoma, pero uno de los aspectos que cabe destacar es que el riesgo de sufrir un accidente cerebrovascular es ligeramente inferior en los hombres que en las mujeres (de hecho,

 » Leer más