Cada vez son más las personas que sufren demencia, un deterioro de la función cognitiva que afecta a la memoria, la comprensión, el cálculo, el lenguaje, etc. Como bien explica la Organización Mundial de la Salud (OMS) este deterioro «suele ir acompañado, y en ocasiones es precedido, por el deterioro del control emocional, el comportamiento social o la motivación».
La situación es grave. La Universitat Oberta de Catalunya (UOC) afirma que «cada tres segundos se diagnostica un nuevo caso en el mundo de demencia». Esto es terrible, pues la demencia no tiene cura y provoca tanto discapacidad como dependencia. Encontrar la terapia más adecuada es fundamental para mejorar la calidad de vida de cada paciente, pero ¿cómo lograr esto?
A pesar de que la demencia no se puede curar actualmente, existen terapias específicas para ralentizar el deterioro cognitivo y ayudar a que la persona con demencia pueda ser independiente el mayor tiempo posible. Esto es lo que busca PSICODEM, una aplicación que permite «elegir entre diferentes intervenciones psicosociales en función del grado de demencia», según la UOC.
Cada intervención que surja tras la elección tiene su correspondiente evidencia científica. De esta manera, la aplicación PSICODEM genera tranquilidad, confianza y es de utilidad tanto para aquellas personas que están cuidando de una persona con un diagnóstico de demencia como para los profesionales que están llevando su seguimiento.