Una vez más, Brad Pitt ha vuelto a hablar de los problemas que tuvo con el alcohol. Por primera vez, ha desvelado que un amigo íntimo le ayudó durante su rehabilitación. Se trata del también actor Bradley Cooper, que fue una figura clave en su recuperación. «Trabajé para estar sobrio gracias a este tío y, desde que lo hice, mis días han sido mucho más felices. Te quiero y te doy gracias por ello», dijo Pitt emocionado durante la gala de los premios National Board of Review of Motion Pictures, que se celebró este miércoles en Nueva York (Estados Unidos).
Allí el exesposo de Angelina Jolie recibió un galardón por su actuación en la última película de Quentin Tarantino, Érase una vez en… Hollywood, donde comparte pantalla con Leonardo DiCaprio. Fue el propio Bradley Cooper quien le entregó este reconocimiento. Pero antes de acudir al evento, el protagonista de El lado bueno de las cosas cumplió con sus obligaciones familiares, como contó Pitt en su discurso: «Bradley acaba de acostar a su hija —Lea de Seine, de dos años, fruto de su relación con la modelo Irina Shayk— y ha corrido hasta aquí para darme el premio». Los actores se fundieron en un abrazo, señal de la gran amistad que los une.
El pasado fin de semana, Pitt ganó el Globo de Oro a Mejor actor de reparto por la misma película. En esa ocasión, se dirigió a Leonardo DiCaprio: «Año tras año, antes de El Renacido, solía ver a sus coprotagonistas agradecerle profundamente cuando recogían un premio y ahora sé por qué. Él es una estrella, un caballero y yo no estaría aquí sino fuera por él. Gracias». También dedicó algunas palabras en la alfombra roja a su exesposa Jennifer Aniston, que protagonizó uno de los momentos más virales de la noche, al mirar atentamente y con una sonrisa al actor.