A pesar de que más de 300 millones de personas padecen depresión en el mundo, y las cifras no dejan de aumentar, todavía existe mucha incomprensión e incluso estigmatización entorno esta enfermedad. El desconocimiento que tienen las personas que nunca han padecido depresión provoca que, en muchas ocasiones, intentemos animar a las que sí la padecen con frases inoportunas que les hacen más daño que les ayudan. Estas son algunas de las que debemos evitar y los motivos para hacerlo.
«¡Anímate! Pon de tu parte»
Por desgracia, estar o no animado, y especialmente cuando tienes depresión, no depende de uno mismo, por lo que no podemos pretender que una persona con depresión se anime sin más, pues le provocará frustración y un podemos acrecentar su tristeza y su sentimiento de culpa. Uno de los síntomas de la depresión es la alteración del estado de ánimo y la incapacidad para disfrutar de las cosas, por tanto, así como a una persona, por ejemplo, que tiene la pierna rota no le decimos que se ponga a caminar, es absurdo e hiriente que le digamos a una persona con depresión que se anime.
«Tienes todo en la vida, no tienes motivos para estar deprimido»
La depresión es multifactorial, y si bien hay veces que se desencadena por algún hecho en concreto que afecte mucho emocionalmente a la persona en cuestión,