El Virus del Papiloma Humano (VPH) son un grupo de virus (unos 200) capaces de infectar la piel y las mucosas. Según asegura la Asociación Española de patología Cervical y Colposcopia, de ellos, unos 40 pueden afectar a las mucosas genitales de ambos sexos y algunos de ellos, especialmente dos, tienen un alto riesgo de producir lesiones premalignas que pueden derivar en cáncer de cuello de útero (los se conocen como VPH AR- de alto riesgo-), del que se detectan 2.500 casos nuevos al año en España. Otros pueden causar lesiones benignas, pero muy molestas, como verrugas genitales o condilomas, y se conoce con VPH de BR, de bajo riesgo.Javier Cortés, Doctor en Medicina y Cirugía, especialista en Obstetricia y Ginecología, Consultor Senior en Oncología Ginecología en Palma de Mallorca y Ex presidente de EUROGIN y de la AEPCC, nos habla de cómo se desarrolla una infección por VPH y de Palilocare, un nuevo medicamento para combatirlas.El VPH se transmite únicamente por el contacto de la piel y las mucosas, por lo que la principal vía de contagio es la sexual. De hecho, es la infección de transmisión sexual más frecuente a nivel mundial, pues se calcula que un 80% de las mujeres estarán expuestas al virus alguna vez en su vida, sobre todo durante los primeros años de vida sexual, y que el entre el 20 y el 30% de las mujeres menores de 30 años son portadoras de algún tipo de VPH-AR.Por suerte, “el 90% de las infecciones son transitorias y se resuelven de modo espontáneo, sin generar mayores complicaciones” y el virus se elimina del organismo en los dos años siguientes sin provocar ningún daño ni síntomas molestos. En otras ocasiones, sin embargo, el virus no se logra eliminar, puede permanecer silente durante años, y si el sistema inmune no logra eliminarlo, provocar daños, estas lesiones pueden ser:•Benignas. Se curan por sí solas en la mitad de los casos. En caso de tratarse de verrugas genitales, el médico decidirá si deben extirparse o esperar a que desaparezcan por sí mismas.•Premalignas, “que pueden evolucionar, en última instancia, al desarrollo de cáncer de cérvix. Es en este grupo de mujeres portadoras crónicas del virus en las que debemos poner el foco”, advierte el doctor Cortés. Estas lesiones se denominan se denominan SIL (lesión escamosa intraepitelial) o CIN (del inglés Squamous Intraepithelial Lesion) o CIN (Neoplasia Cervical Intraepitelial),