Cuando la uña de un dedo crece de forma irregular y se introduce en la piel se le llama uña encarnada. Se trata de una alteración que puede llegar a causar mucho dolor, inflamación, enrojecimiento e hinchazón en el dedo afectado, e incluso derivar en problemas de salud graves si no es detectada a tiempo. Aunque, en cualquier caso, siempre será más conveniente consultar a un especialista y seguir sus indicaciones, evitando así posibles problemas de salud mayores en un futuro.
¿Por qué se encarnan las uñas?
Factores genéticos pueden ser causantes de esta afección, como una curvatura de la uña mayor de lo normal, o determinadas deformidades; los golpes y traumatismos también puede derivar a medio y largo plazo en la encarnación de la uña. Aunque la gran mayoría de factores que ocasionan esta dolencia son consecuencia de hábitos de vida desaconsejables, como el uso de calzado poco respetuoso con la morfología del pie, o una higiene de los pies deficiente.
Padecer ciertas enfermedades como la diabetes también incrementa la posibilidad de desarrollar esta dolencia, entre otros aspectos por el flujo sanguíneo deficiente que provoca esta enfermedad. De hecho, los síntomas de la diabetes muchas veces se manifiesta a través de las uñas, mediante presencia de hongos, infecciones y/o cambio de color de las mismas.