Poco a poco, España y Europa van recuperando la normalidad. Con el paso del tiempo y conforme el coronavirus vaya perdiendo fuerza, los negocios irán reabriendo. Pero no como los conocemos hasta ahora. Las tiendas de ropa cambiarán e ir de compras ya no será lo mismo.
El British Retail Consortium, el organismo del sector de la moda al por menor, ha publicado este domingo un informe en el que marcan las líneas de lo que ocurrirá a partir de ahora en Reino Unido, un modelo que seguramente será parecido al del resto de países, recoge el Daily Mail.
Así, el consorcio recomienda a las tiendas que restrinja el acceso a los aseos y a los probadores, así como el aforo de las tiendas. Esto significaría que los clientes no podrían probarse las prendas antes de comprarlas.
Otras medidas son la eliminación de asientos donde los hubiera; establecer puertas diferentes para entrar y salir; mantener las puertas abiertas en la medida de lo posible para favorecer la ventilación; pago con tarjeta; disponibilidad de geles hidroalcohólicos; o limpieza exhaustiva y periódica de manillas de puertas, botones de ascensores o mostradores.
En general, las tiendas deberían calcular su aforo de tal manera que no pueda haber menos de dos metros entre las personas que haya en su interior.
El sector está pendiente ahora de que las autoridades británicas autoricen las reaperturas de los negocios.