Son muy pocas las personas que tienen un botiquín de primeros auxilios en casa. Sí es cierto que pueden contar con determinados elementos, como povidona o agua oxigenada, tal vez, tiritas. Pero ¿esto es suficiente? Cuando hay niños pequeños en casa la necesidad de tener un botiquín de primeros auxilios es mayor. Pues corren mayores riesgos de sufrir accidentes en casa.
El botiquín debería de ser una caja accesible y que se revise con determinada frecuencia. Así, se pueden sustituir los productos que ya estén caducados. Con todo, este botiquín de primeros auxilios se puede llevar a cualquier parte. Cuando los progenitores se van de vacaciones con sus hijos, por ejemplo.
¿Qué debe contener un botiquín de primeros auxilios?
La Asociación Española de Pediatría (AEPED) recomienda introducir en el botiquín de primeros auxilios cuando hay niños en casa uno o dos antisépticos para desinfectar y curar las heridas. Normalmente, con agua oxigenada y povidona yodada sería suficiente. Asimismo, aconseja introducir en él suero fisiológico para limpiar la nariz y los ojos de los más pequeños.
No deben faltar en el botiquín de primeros auxilios tiritas para tapar y proteger pequeñas heridas, ni tampoco gasas o esparadrapos para aquellas que sean algo más grandes. También, el botiquín para niños debería contener algún analgésico para el dolor y antipiréticos que ayuden a controlar la fiebre.