Cielos despejados y muchas horas de sol son una de las características de los veranos en España, por eso no es raro que cada vez más personas quieran saber qué consejos tienen que seguir para plantarle cara al calor y evitar que las altas temperaturas les afecten en exceso. Los golpes de calor son más frecuentes de lo que pensamos, por lo que buscar la sombra, beber suficiente agua y evitar las horas de máxima exposición solar se convierte en esencial para protegernos.
Protegernos del sol también pasa por cuidar nuestra piel, algo de lo que somos mucho más conscientes en verano que en otras épocas, aunque es necesario hacerlo durante todo el año. Sin embargo, en ocasiones intentando hacer las cosas bien, nos equivocamos, como cuando utilizamos un protector solar que ya habíamos estado utilizando hace un año. Una práctica que esconde riesgos de los que no siempre somos consientes, aunque todos deberíamos conocerlos.
¿Puedo usar el protector solar del año pasado?
En bastante habitual querer aprovechar el protector solar que nos ha sobrado de un año para otro, pero lo cierto es que esto no es una buena idea, por lo menos si ya lo abrimos en su momento, porque en caso de que lo hayamos conservado cerrado, la vida de la crema es más larga.