Con el otoño entrado en faena en España, los cambios bruscos de temperatura y las reuniones sociales, el virus de la gripe y otros similares que atacan en esta época del año campan a sus anchas. Las infecciones respiratorias tienen en estos meses su punto álgido de acción y, aunque en la mayoría de los casos no es un asunto grave, sí debemos tomar una serie de precauciones para ‘cortar’ por lo sano cuanto antes.
Una vez que empezamos a notar los primeros síntomas del resfriado, ya sabemos que debemos intentar descansar bien, evitar los cambios bruscos de temperatura, no frecuentar lugares con demasiada gente alrededor para minimizar los contagios, frenar el ejercicio intenso durante unos días, e hidratarnos en abundancia. Pero, ¿sabemos lo que ‘no’ debemos hacer? Un inmunólogo nos lo explica.
¿Qué causa los resfriados?
Durante la época de otoño e invierno las infecciones respiratorias son muy frecuentes y ocasionan síntomas tales como goteo nasal, estornudos, dolor de garganta, tos y moco, e incluso en algunas ocasiones también fiebre y síntomas generales como dolores osteomusculares generalizados y las incómodas cefaleas.
Como nos explica el neumólogo Francisco Sanz Herrero, secretario del área de Tuberculosis e Infecciones Respiratorias de la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR),