El Tribunal Superior de Galicia ha condenado a la Xunta a abonar los 22.100 euros —más intereses— que le reclamó un paciente gallego que se sometió en una clínica privada de Burdeos (Francia) a una operación de cáncer de próstata mediante laparoscopia robotizada, una técnica que no se realiza en la sanidad pública gallega pero que sí figura entre las prestaciones de la cartera de servicios del Sistema Nacional de Salud. El paciente, de 46 años, pidió autorización expresa del Servicio Gallego de Salud (Sergas) para acogerse a los acuerdos de asistencia sanitaria fronteriza pero no obtuvo respuesta.

El tribunal interpreta que el silencio administrativo implica la aceptación de la solicitud del paciente —la resolución motivada debe notificarse en un plazo máximo de 35 días— en una sentencia pionera en cuanto a la asistencia sanitaria transfronteriza que puede abrir las puertas a otras personas que se encuentren en la misma situación que el ciudadano gallego. El texto establece que esta técnica incluida en la cartera sanitaria común “es beneficiosa” y debe contemplarse también en la complementaria de la Xunta. De no ser así, obliga al Gobierno gallego a abonar los gastos generados si el paciente sale de la comunidad a operarse.

La laparoscopia robotizada —que disminuye el tiempo de recuperación y los riesgos de disfunción eréctil e incontinencia urinaria— está implantada en una clínica privada de A Coruña y en al menos 11 hospitales del Sistema Nacional de Salud desde su estreno en España en 2006. 

A este paciente de Santiago se le diagnosticó el cáncer de próstata en abril de 2016, por lo que decidió someterse a esta cirugía en esta famosa clínica del suroeste de Francia. En agosto de ese mismo año, reclamó los gastos de la operación pero su petición fue desestimada por la Xunta. Luego recurrió a los tribunales y en primera instancia, un juzgado de lo Social le dio la razón al Sergas, pero, ahora, el tribunal la ha revocado en apelación y ha sido declarada firme.

El coste del robot necesario para esta técnica está entre millón y medio y dos millones de euros.

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