Afrontar un diagnóstico nunca es sencillo. Menos aún cuando la palabra clave tiene unas connotaciones tan inmensas e imponentes como es el caso del cáncer.
Más allá del proceso contra la enfermedad, con todas las diferencias que existen entre cada caso, las personas que pasan por este trance pueden experimentar consecuencias y procesos muy duros desde el punto de vista emocional y psicológico. Con motivo del día mundial contra la enfermedad, que se celebra este sábado, es importante recordar este aspecto a menudo olvidado en el abordaje integral de la enfermedad.
«Todas las unidades deberían ofrecer esta asistencia»
«Ningún paciente de cáncer debería ser diagnosticado y tratado sin recibir asistencia psicológica», asevera el doctor Alvar Ocano, médico de familia y gerente médico de Aegon. Por eso, explica, nace una disciplina conocida como psico-oncología: «La psico-oncología se postula como una subespecialidad de la oncología para atender los aspectos psicológicos y comportamentales del paciente con cáncer. Al menos el 50% de los pacientes con cáncer presentan en algún momento un problema emocional (trastorno depresivo, trastorno de ansiedad, etc.) o van a mostrar importantes síntomas de estrés, relacionados con los tratamientos o con la evolución de la enfermedad; incluso, después de que esta se haya superado».
«Por un lado», continúa, «se debe trabajar sobre la respuesta emocional del paciente ante el diagnóstico de cáncer,