Enero es sinónimo de ajustar el bolsillo tras el despilfarro de las navidades, de las conocidas dietas detox tras las comidas copiosas y de proponernos volver al ejercicio con grandes expectativas. Algunas personas vuelven al gimnasio y otras lo prueban por primera vez. ¿Hay que machacar el cuerpo para sentirse mejor? El nutricionista Pablo Ojeda advierte sobre la mejor forma de coger ritmo sin descuidar el corazón.
Tanto si volvemos a la rutina del ejercicio como si debutamos en él con el inicio del año es importante, como resalta este experto, tener conciencia de que no se debe ir «de cero a cien» con las pretensiones de ponernos en forma a toda velocidad. Articulaciones, huesos y corazón se resentirán y además provocarán que sintamos cada vez más pereza a la hora de hacer actividad física hasta que que eso desemboque en abandonar el hábito del entrenamiento.
Ojeda propone que toda aquella persona sana se enfoque en no hacer más de 120 y 125 pulsaciones por minuto. Así, asegura que la ciencia ha demostrado que «en ese trabajo se quema mucha más grasa que cuando hacemos trabajos de alta intensidad con el corazón a tope», explica.
Rutinas realistas que garantizan perder peso
Tal y como ha explicado el nutricionista en un programa radiofónico,