Las horas de sol de las que disfrutamos en España hacen que queramos aprovechar el día al máximo. En ocasiones eso se traduce en más tiempo de ocio, pero también en que la hora de la cena se atrasa; la hora a la que se cena en algunos países europeos bien podría confundirse con la merienda en el nuestro.

Esta costumbre o tradición de cenar tarde tiene ciertas consecuencias, algunas de ellas para nuestras horas de sueño, pues tendemos a atrasar la hora de acostarnos para no hacerlo con el estómago lleno, pero también puede llegar a afectar a nuestra salud, porque puede afectar negativamente a nuestro metabolismo, impidiendo, entre otras cosas, que perdamos peso. Por lo menos esa es la conclusión a la que han llegado investigadores de la Universidad de Harvard.

Cenar tarde: las consecuencias para la salud

Publicado en la revista Cell Metabolism, el estudio realizado por investigadores de la Universidad de Harvard seguía a 16 pacientes con sobrepeso u obesidad. Los voluntarios variaban los horarios de comidas, mientras que mantenían estables la dieta y los horarios de descanso, para poder apreciar de este modo cómo este aspecto concreto influye sobre la quema de calorías, el hambre y los cambios en el tejido adiposo. Se establecieron dos grupos,

 » Leer más