La abogada Isabel Bonilla, una de las fundadoras de la Asociación Internacional de Juristas de Familia, advierte de que en las parejas en las que uno de los padres se niega a vacunar a sus hijos, “si el caso termina en el juzgado, por mucho que te opongas, finalmente se va a vacunar”.
“Hay gente más reacia pero, en todos los casos que he tratado, cuando un progenitor se opone, acaba en el juzgado con un incidente de patria potestad para que diga el juez quién la tiene a la hora de decidir si se pone o no la vacuna, y en todos los casos que hay, la jurisprudencia se le da al progenitor que quiere”, afirma esta letrada almeriense.
Así lo asegura la que también fue hasta 2016 miembro de la junta directiva de la Asociación Española de Abogados de Familia (AEAFA), quien, no obstante, ha añadido que, a pesar de que hay conflictos, en una “gran mayoría” de los casos se está llegando a acuerdos entre los abogados de las dos partes.
La pandemia también ha generado otros problemas como la compensación del tiempo de más que ha podido pasar un niño con determinado padre durante el confinamiento, o progenitores que han instado a la otra parte a llevárselo durante ese tiempo porque no podían hacerse cargo de él.