La batata se ha hecho un hueco en la dieta nacional. Aunque España está muy lejos de las impresionantes cifras de cultivo que atesoran países como China, Malawi o Nigeria, la provincia de Málaga concentra la mayor superficie de Europa dedicada a este tubérculo. Y aunque parecía que nada podía destronar a la patata como la reina de la guarnición, es cada vez más frecuente encontrarnos con batata, algo que sin embargo no agradecerán alérgicos ni personas con cálculos renales.
En primer lu gar, hay que despejar una duda recurrente: ¿Batata y boniato son lo mismo? La pista más sencilla es el color, de forma que la batata tendría la piel naranja y el boniato al de color morado o púrpura. Una diferencia cromática que esconde ciertas diferencias en cuanto influye en sus nutrientes, de forma que la batata contiene más provitamina A o betacaroteno que el boniato, una sustancia importante para proteger el sistema inmunitario.
Batata y boniato, Ipomoea batatas, pertenecen a la familia de plantas Convolvulaceae, caracterizadas por su raíz tuberosa comestible. En cuanto a sus propiedades nutricionales, destacan sus cantidades de almidón, vitaminas, fibras (celulosa y pectinas), minerales (potasio) y betacaroteno. También es característico su sabor dulce,