El cáncer es una enfermedad compleja, en cuyo desarrollo interviene multitud de factores: ambientales, genéticos, de estilo de vida… Así, no es de extrañar que algunos determinados tipos de cáncer sean más prevalentes en unas zonas geográficas que en otras.
Por supuesto, estas diferencias son observables en las grandes regiones del mundo: los tumores más frecuentes no son los mismos en África que en Asia ni que en Europa. Pero, incluso, estos diferentes patrones son visibles a una escala mucho más reducida, en las distintas zonas de un país relativamente pequeño como es España. En el mapa que presentamos a continuación se pueden ver los casos que estuvieron activos en 2021 en cada provincia por cada 100.000 habitantes (datos del observatorio de la Asociación Española Contra el Cáncer).
¿Por qué el cáncer no se reparte igual por todo el territorio?
Un ejemplo claro de esta desigual distribución lo tenemos en el cáncer de páncreas, que es significativamente más frecuente en unas zonas del país que en otras.
Las razones por las que esto sucede, como ya decíamos, son complicadas. Se sabe que en este tipo particular de tumor interviene una serie de factores de riesgo importantes, como son el uso de tabaco (tabaquismo), el padecer sobrepeso u obesidad, el padecer diabetes tipo 2, el padecer pancreatitis crónica,