Un estudio pionero realizado en España por investigadores de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM) ha arrojado nuevos hallazgos sobre cómo la introducción de inestabilidad en el popular ejercicio de press de banca puede alterar significativamente la forma en que los músculos trabajan, mejorando el control motor y la activación muscular en función del nivel del deportista.
Publicado en la revista Sports, el estudio revela que una ligera inestabilidad puede ser beneficiosa para equilibrar los niveles de fuerza, fortalecer eslabones débiles e incluso ayudar en rehabilitación.
El equipo de investigación, perteneciente a la Facultad de Ciencias de la Actividad Física y del Deporte (INEF) de la UPM, analizó acciones específicas bajo diferentes condiciones de estabilidad, empleando desde barras tradicionales hasta superficies inestables, con cargas que oscilaban entre el 40% y el 80% del peso máximo del deportista. Se evaluaron parámetros clave como la velocidad de ejecución, la fuerza aplicada y la capacidad de mantener el control postural.
Los resultados evidenciaron diferencias notables entre deportistas entrenados y principiantes, subrayando el impacto de la inestabilidad tanto en el rendimiento como en la seguridad durante la ejecución.
Además, el estudio destaca la importancia del tipo de inestabilidad introducida para lograr beneficios sin riesgos. Según Moisés Marquina, miembro del Grupo de Investigación Deporte y Entrenamiento involucrado en el estudio,