Los investigadores del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) han desarrollado una nueva forma de registrar el historial de vacunación de un paciente almacenando los datos mediante un tinte que es invisible a simple vista y se administra debajo de la piel al mismo tiempo que la vacuna.Cada año, la falta de vacunación conduce a aproximadamente 1,5 millones de muertes evitables, principalmente en países en desarrollo. Un factor que hace que las campañas de vacunación en esas naciones sean más difíciles es que hay poca infraestructura para almacenar registros médicos, por lo que a menudo no hay una manera fácil de determinar quién necesita una vacuna en particular.»En áreas donde las cartillas de vacunación en papel a menudo se pierden o directamente no existen y las bases de datos electrónicas son desconocidas, esta tecnología podría permitir la detección rápida y anónima del historial de vacunación del paciente para garantizar que cada niño sea vacunado«, explica, un exinvestigador postoctoral del MIT que ahora es profesor asistente de bioingeniería en la Universidad de Rice.Los investigadores mostraron que su nuevo tinte, que consiste en nanocristales llamados puntos cuánticos, puede permanecer durante al menos cinco años debajo de la piel, donde emite luz infrarroja cercana que puede ser detectada por un teléfono inteligente especialmente equipado.McHugh y el excientífico visitante Lihong Jing son los autores principales del estudio, que publicado en la revista ‘Science Translational Medicine’. Ana Jaklenec, científica investigadora del Instituto Koch para la Investigación Integral del Cáncer del MIT, y Robert Langer, profesor del Instituto David H. Koch, del MIT, son los autores principales del artículo.

Scientists have created a vaccination platform that uses quantum dots to invisibly encode vaccination history in skin – a technology that could help clinicians maintain more accurate medical records in countries worldwide. #Vaccination #GlobalHealth https://t.co/y6ZKLYGQE5 pic.twitter.com/pzQinEtXa7

— Science Translational Medicine (@ScienceTM) December 20, 2019

Hace varios años, el equipo del MIT se propuso diseñar un método para registrar la información de vacunación de una manera que no requiera una base de datos centralizada u otra infraestructura. Muchas vacunas, como la del sarampión, las paperas y la rubéola (MMR), requieren dosis múltiples espaciadas a ciertos intervalos. Sin registros precisos, los niños pueden no recibir todas las dosis necesarias. «Para estar protegido contra la mayoría de los patógenos, se necesitan múltiples vacunas -añade Jaklenec-.

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