¿Es necesaria la sal? En su justa medida, sí, pues aporta sodio al organismo, un micronutriente crucial en el volumen plasmático, la transmisión de impulsos nerviosos y el correcto funcionamiento de las células. Con todo, no es indispensable desde el punto de vista de la nutrición porque el sodio puede obtenerse de la carne, la leche y los crustáceos. Y el exceso del consumo de sal está asociado a problemas renales, de retención de líquidos y, sobre todo, a la hipertensión. Su capacidad de realzar el sabor de los alimentos es lo que hace que se nos haga muy difícil prescindir de ella pero, afortunadamente, tenemos aliados para conseguirlo: las especias.

La profesora de cocina y propietaria de la tienda Spicy Yuli de Madrid, Juliana Perpén, defiende que aportan un sinfín de matices y, en dietas muy restrictivas, limitadas y aburridas (aunque no tienen por qué serlo necesariamente), abren el abanico culinario. Si sabemos usarlas, nunca comeremos el mismo filete dos veces. «Una carne a la plancha, típica cuando estás a régimen, no tiene por qué ser un sufrimiento, puedes añadirle pimienta, comino y cúrcuma, un curry que tengas por casa o una mezcla para pinchos morunos, y darle sabor sin calorías extra». Toma nota de cómo dar sabor a la comida y hacerla saludable con solo un toque de muñeca.

Cinco especias que podemos usar para reducir la sal de las comidas

Comino, un idilio de siglos

Esta semilla, ya sea entera o molida, destaca por su alto contenido en minerales y se ha considerado un sedante natural. También se han atribuido a este condimento propiedades antioxidantes, digestivas y antiflatulentas. Tostado y machacado, el comino desprende notas de frutos secos y limón, y cuando se fríe en aceite, da a los platos un toque picante, según recoge el libro de la autora Niki Segnit La enciclopedia de los sabores.

«Tiene mucho sabor y está en nuestra memoria alimentaria porque lo llevamos comiendo muchos siglos en España. Es el gran aliado para aliñar el pescado antes de freírlo, para que no haga falta echarle tanta sal,

 » Más información en elpais.es