Pruebas iniciales
Antes de la operación, usted será examinado/a en detalle en el hospital en varias ocasiones. Las pruebas incluyen análisis de sangre, radiografía de los pulmones y un chequeo de las funciones de corazón y circulación sanguínea.
Consulta con médicos
Antes de la amputación, el médico al cargo le explicará qué va a ocurrir durante la operación. También hablarán en detalle con usted sobre lo que ocurrirá después. Aquí tiene usted la oportunidad de preguntar cualquier cosa que considere importante. Lo mejor es tomar notas antes de las consultas con todo lo que quiera preguntar al médico, de esta forma no olvidará nada. No dude en preguntar de nuevo si no ha quedado claro algún punto.
Preparación concienzuda
Si fuera posible, debería comenzar a realizar los ejercicios de rehabilitación incluso antes de la operación. Esto le permite fortalecer su musculatura de antemano. En caso de una amputación de pierna por ejemplo, es de utilidad practicar tan pronto como sea posible la transferencia a/desde la cama. Practicar estas actividades puede facilitar mucho el postoperatorio para usted. Consulte a su médico o terapeuta cuáles son los ejercicios más adecuados.
También ayuda hablar con un técnico ortopédico antes de la amputación para considerar qué prótesis se pueden adaptar a usted o no. Ello le da una mejor idea de sus expectativas durante la rehabilitación.
Soporte psicológico
Una amputación es un momento vital dramático. Por ello quizá convenga buscar ayuda psicológica. Puede discutir multitud de cosas con terapeutas especializados en psicología, aliviando a su familia y amigos. Estas discusiones también le pueden ayudar a reunir fuerzas para esta nueva etapa de su vida. Cuanto antes busque esa ayuda, mejor, teniendo en cuenta que vencer conflictos mentales y miedos contribuye a una cura rápida y excelente calidad de vida. Una amputación combinada con miedo puede desencadenar en una depresión. Esto debe evitarse.
Hablando con otros amputados
Le recomendamos hablar con personas con una lesión o amputación similar a la suya. Esto da coraje. Usted no está solo/a. Es bueno escuchar cómo otra persona está lidiando con una situación similar, y cómo su vida ha sufrido cambios. Se suelen intercambiar pequeños trucos, por ejemplo sobre el manejo de la prótesis.
Si usted busca contacto con otras personas afectadas, lo mejor es contactar con sus médicos, terapeutas o profesionales ortopédicos. Ellos generalmente saben cómo encontrar un grupo de autoayuda.