Las ojeras son una alteración de la piel a la que fundamentalmente se da una importancia estética. Nos preocupamos por saber cuál es la mejor forma para ocultar o disminuir esas pequeñas coloraciones que aparecen debajo del párpado inferior. La falta de descanso es uno de los motivos más frecuentes y además provocan su inmediata aparición, pero también pueden ser un síntoma de diversas patologías.
Es una de las dianas históricas de la industria del maquillaje, especialmente en lo que respecta a la población femenina. Disminuir y ocultar en la medida de lo posible esas fastidiosas manchas oscuras ha sido una auténtica obsesión durante el último siglo. Cremas hidratantes, ácido hialurónico, retinol… Hay una lista infinita de productos para las personas que se propongan combatirlas, si bien hay remedios simples y caseros que no pasan de moda, como las compresas frías o el pepino.
El cansancio es, como ya se ha indicado, un factor infalible y además instantáneo: una mala noche provocará indefectiblemente esa pequeña pigmentación. Pero desde la Asociación Española de Dermatología y Venereología (AEDV) llaman la atención sobre otros condicionantes a tener en cuenta, como los factores genéticos o una dieta inadecuada, es decir, aquella que se caracterice por un exceso de sal y de alimentos procesados y un déficit de hidratación.