A pesar de que todo el mundo es consciente de que el tabaco no es bueno para la salud, el 16,4% de las mujeres y el 23,3% de los hombres fuman a diario, tal y como se afirma en la Encuesta Europea de Salud en España del año 2020. De hecho, el tabaco es la primera causa de muerte prevenible y se relaciona directamente con más de 15 tipos de cánceres diferentes.
Tomar la decisión de dejar de fumar no siempre es sencilla, pero es el primer paso para conseguirlo. Después llega el momento de pasar a la acción, lo que trae asociado dificultades añadidas. Mientas que para algunas personas su fuerza de voluntad es suficiente, otras necesitan ayuda para poder dejar de fumar.
Dejar de fumar: tratamientos y síntomas
Una de las formas más frecuentes es empleando parches y chicles de nicotina combinados. Los parches ayudan a conseguir un nivel estable de nicotina a lo largo del día, lo que reduce las ganas de fumar y la ansiedad; los chicles o pastillas de nicotina ayudan a reducir las ganas de fumar en un momento concreto. También hay medicamentos concretos que ayudan a disminuir las ganas de fumar y que se pueden emplear en situaciones concretas.
En ocasiones no es necesario llegar a esos extremos,