Los trastornos del sueño son más comunes de lo que podríamos imaginar, y tienen efectos muy marcados y serios en la calidad de vida de las personas que los padecen: por ejemplo, en el caso de la apnea del sueño, eleva el riesgo de sufrir un accidente de coche de manera similar a cómo lo hace el consumo de alcohol.
Afortunadamente, una vez que se detectan muchos de ellos se pueden tratar. Lo difícil, en cambio, suele ser el primer paso: que la pareja o la familia sean capaces de identificar estos problemas puede ser decisivo para poder afrontarlos.
¿Qué es la apnea del sueño?
El síndrome de apnea-hipopnea durante el sueño, o síndrome de apnea obstructiva del sueño, es un trastorno respiratorio del sueño consistente en episodios de obstrucción de las vías respiratorias superiores durante el sueño. Es decir, durante un breve tiempo, se interrumpe o disminuye considerablemente el flujo respiratorio de la persona afectada.
Estas pausas duran unos segundos o incluso algún minuto, tras lo cual la respiración normal se restablece: sin embargo, los episodios se producen entre 5 y 30 veces por hora.
Se trata de un problema que repercute muy negativamente en la calidad del descanso de los pacientes afectados, por lo que puede conllevar una gran afectación en la vida diaria y un impacto negativo a nivel psicológico,