El síndrome de hikikomori es un trastorno psicopatológico y sociológico en el que personas que lo padecen se aíslan socialmente de manera voluntaria, no salen da casa -e incluso de su habitación- más que para lo imprescindible, dejando de lado cualquier tipo de compromiso social, ya sea con sus amigos, familiares e incluso llegan a abandonar educación y empleo. Esto puede tener graves consecuencias para su salud, tanto física como mental.
Aunque este término se acuñó por primera vez en Japón hace dos décadas, y allí y en otros países asiáticos tiene bastante prevalencia (un 1,9 % de la población), en los últimos años se ha descubierto que se trata de un fenómeno global que afecta a varios países occidentales, como España, Italia o Estados Unidos, donde cada vez se diagnostican más casos, sobre todo tras la irrupción del coronavirus. En España se conoce también como el síndrome de la puerta cerrada.
El hikikomori es un trastorno que afecta especialmente a jóvenes varones, aunque también existen personas de mayor edad y mujeres. Se trata de jóvenes que deciden, de manera voluntaria, abandonar la sociedad y aislarse en su casa o su habitación para evitar cualquier contacto social. Su vida suele girar en torno a las nuevas tecnologías, Internet, videojuegos… Los afectados por este síndrome no tienen nada que ver con los que padecen agorafobia,