El cáncer es una de las causas de muerte más importantes en todo el mundo, y a menudo sobreviene como consecuencia de otras condiciones. Una de ellas es el síndrome de Lynch, que predispone a sufrir cáncer de colon, de endometrio y otros tipos.
El síndrome de Lynch es un trastorno hereditario que está en el origen de aproximadamente 3 de cada 100 cánceres de colon y endometrio. A menudo, además, el cáncer se manifiesta en estos casos a una edad más temprana que la que es habitual en la población en general.
Se trata de una herencia autosómica dominante, con lo que si uno de los progenitores porta esta mutación del gen el hijo tendrá un 50% de probabilidades de heredarla; en este caso, además, es indiferente tanto el sexo del progenitor portador como el del bebé.
Concretamente, la mutación que lo desencadena afecta a algunos genes responsables de corregir cambios menores en el código genético que se producen de forma natural en el proceso de replicación celular. Si no se produce esta corrección, estos pequeños errores genéticos se van acumulando, lo que aumenta las posibilidades de que las células afectadas puedan volverse cancerosas (ya que, cuando esto ocurre, es por estos pequeños errores genéticos).
El síndrome de Lynch no tiene en sí mismo síntomas característicos;