La vitamina C, también conocida como ácido ascórbico, es una vitamina esencial soluble en agua que proporciona numerosos beneficios para la salud. Sin embargo, en cantidades excesivas puede ser dañina.
Según el Instituto Nacional de Salud del Gobierno de Estados Unidos, «las frutas y verduras son las mejores fuentes de vitamina C». Afortunadamente en España, gracias a la dieta mediterránea, su consumo es frecuente entre la población, lo que genera efectos muy positivos para la salud. Para obtener la cantidad recomendada de vitamina C, se aconseja consumir una variedad de alimentos como, «frutas cítricas (naranjas, kiwis y pomelos, por ejemplo) y sus jugos». También recomiendan incluir «pimientos rojos y verdes» y otras frutas y verduras como brócoli, fresas, melón y tomates.
Beneficios de la vitamina C
Según el Instituto Nacional de Salud del Gobierno de Estados Unidos, estos son los beneficios principales de la vitamina C.
Fortalece el sistema inmunológico: La vitamina C es crucial para la generación de glóbulos blancos, que son esenciales para combatir infecciones y enfermedades.
Prevención del cáncer: Consumir grandes cantidades de vitamina C a través de frutas y verduras puede reducir el riesgo de desarrollar ciertos tipos de cáncer, como el de pulmón, mama y colon, según el Instituto Nacional de Salud del Gobierno de Estados Unidos.