Se estima que en torno a un millón de personas padece en la actualidad alzhéimer en España. Se trata de una enfermedad neurodegenerativa grave cuyas verdaderas causas continúan resultándonos elusivas y para la que carecemos de cura.
Con todo, a día de hoy se están probando varios enfoques experimentales para tratarla que están logrando resultados prometedores, y algunos de ellos resultan verdaderamente sorprendentes. Este es el caso de un nuevo tratamiento quirúrgico sobre los ganglios linfáticos que está probándose como parte de un ensayo clínico en hospitales de China y que, de acuerdo con los resultados preliminares, logra una reducción significativa de los síntomas en al menos el 80% de los pacientes.
La conexión del cerebro y el sistema linfático
Así lo reportan los autores, liderados por el doctor Tang Juyu del Hospital Xiangya de la Universidad Central del Sur, para el medio chino South China Morning Post, en el que sin embargo advierten de que se trata de una observación aún preliminar y cualitativa. De todos modos, son ya más de 70 pacientes los que se han sometido a la intervención.
Desde hace ya algún tiempo existe interés en el potencial de la anastomosis linfático-venosa (LVA) cervical profunda para tratar los síntomas del alzhéimer, la forma más común de demencia.